Tu cuerpo es un oasis dispuesto para la guerra,todas tus armas preparadas, apuntando al cataclismo
tus brazos al cielo alzas, como las palmeras
y yo me hundo contigo hasta el fondo del abismo.
Un fanático viaje con luchas de cuerpos
mi boca masticando flores y bebiendo tus rios
tus dedos me clavas provocando surcos
donde germinan amapolas de rojo delirio.
Todo mi horizonte es un campo de batalla
el aire se ha incendiado, mi sangre está ardiendo
solo escucho mi corazón cuando tu te callas
y en los gritos de tu orgasmo, estoy sucumbiendo.
Las aguas de tu oasis en mi oasis navega
enfrian las pieles humedas por la tempestad
un remanso de paz sobre tus caderas
relajan ese fuego de tu dulce volcán.
Hemos ganado esa guerra
ganaremos muchas más
cuando tu tierra en mi tierra
viva por la eternidad...
Ángel Reyes Burgos
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